Therion Barcelona - 5/10/2012

¡Y el frío viento del Norte nos trajo a Therion! En una época en que muchas grandes bandas apuestan por recordar a sus épocas más gloriosas (algunas de forma magistral como Moonspell, otras repitiéndose hasta aburrir) Therion nos ofrecen un nuevo álbum.

Un nuevo trabajo autoproducido por el alma de la banda, el gran Christofer Johnsson y que sólo va a vender, en una primera fase, en los conciertos. La primera grata sorpresa al llegar a Razmatazz, fue encontrarlo en el área de venta de "merchandasing", atendiendo a todo aquel que se lo pedía, haciéndose fotos y firmando autógrafos. Todo un regalo para los fans. Esta gira es la última en tres años, según explica el propio Johnsson en su web, ya que va a dedicarse a producir y componer una ópera. Imaginación y creatividad no le van a faltar. Entramos para acabar de escuchar a los prometedores franceses Eloyse. A partir de ahí ¡La magia!.

Una escenografía sencilla pero impactante y Lori Lewis aportando la belleza nórdica y vocal, además de los impresionantes Vikstroms teatralizan cada momento. Un nuevo teclista al más puro estilo de imagen Candlemass y los históricos de Therion liderados por un Johnsson espléndido. El público bailó, cantó, disfrutó encantado sus clásicos, siguiendo con pasión "Son of the Sun", "Gothic Kabbalah", "Ginnungagap" y muchas de las magníficas composiciones de la banda. También sonaron varias canciones del nuevo disco como "Poupée de cire" (increible) "J'ai le mal de toi" o "Une fleur dans le coeur". "Les fleurs du mal" basado en la obra del poeta maldito francés Baudelaire va a convertirse sin duda en uno de los clásicos de la banda, con varias versiones de Gainsbourg, lleno de arte en mayúsculas. El artwork también vale mucho la pena. Un rato de buenísima música, protagonismo múltiple de excelentes voces, espectaculares canciones, mezclando los medios tiempos con caña. El bis no podía ser otro que "To Mega Therion" con la gente volviéndose loca. Nunca fueron mis favoritos (absurdo purismo metal) pero el otro día me ganaron para siempre con su arte, recuperando la escucha de clásicos como Vobin o Secret of the runes. ¡Gracias Therion por traernos algo de grandeza musical y belleza lírica, mezclada con buen metal!